La mujer de Septiembre
Te he esperado las últimas noches de septiembre,
impaciente, y embebido por algo que mueve,
casi nostálgico, deseando tu palabra, gemido y beso,
dejando las sábanas acartonadas de tanto verso.
Una noche en Santiago y otra en Concepción,
de adoloridas manos que explotan
al aroma del viejo puerto y río San Lorenzo,
alimentándonos con poesía y uno que otro queso.
Entre sueños me hundo en tu ser,
que se me antoja profundo y húmedo.
Con los brazos ardorosos y una sonrisa,
me siento dentro, dándote una mordida.
Goyette Dos Gallos
impaciente, y embebido por algo que mueve,
casi nostálgico, deseando tu palabra, gemido y beso,
dejando las sábanas acartonadas de tanto verso.
Una noche en Santiago y otra en Concepción,
de adoloridas manos que explotan
al aroma del viejo puerto y río San Lorenzo,
alimentándonos con poesía y uno que otro queso.
Entre sueños me hundo en tu ser,
que se me antoja profundo y húmedo.
Con los brazos ardorosos y una sonrisa,
me siento dentro, dándote una mordida.
Goyette Dos Gallos